CERRADO PERMANENTEMENTE
La Playa de El Salado, en la pequeña y serena Isla de La Graciosa, parte del municipio de Teguise, Las Palmas, ofrece una experiencia única para los amantes del camping y la naturaleza. Esta playa se destaca por su tranquilidad, sus aguas cristalinas de tonos verde turquesa y su arena fina y blanca, ofreciendo un paisaje casi virgen y espectacular. Con una longitud considerable y un ancho modesto, la playa invita a la desconexión total en un entorno que parece sacado de una postal del Caribe.
Pronto añadiremos fotos de las instalaciones.
Características y Servicios
La Playa de El Salado dispone de servicios básicos para una estancia confortable, incluyendo duchas y aseos. La zona es conocida también por ser un punto de acampada libre, aunque con restricciones como el requerimiento de permisos y reservas previas para garantizar la sostenibilidad del entorno.
Actividades en la zona
Las actividades principales en la Playa de El Salado abarcan desde el submarinismo hasta el simple placer de relajarse en sus aguas cristalinas y arena dorada. Además, la tranquilidad de la zona la hace perfecta para desconectar de la rutina y reconectar con la naturaleza. Otras actividades cercanas incluyen explorar el resto de La Graciosa o disfrutar de sus otras playas.
Ubicación
Como se Reserva
Para acampar en la Playa de El Salado, es necesario obtener un permiso y hacer una reserva previa, cumpliendo con las normas establecidas como no exceder el máximo de personas permitidas y el tiempo de estancia. Los interesados deben contactar a las autoridades locales o a la oficina de turismo para más detalles y para iniciar el proceso de reserva.
CERRADO PERMANENTEMENTE
Opinión Personal
La playa descrita se presenta como una amplia extensión de arena blanca situada cerca de Caleta de Sebo, en La Graciosa, accesible tras un paseo de unos 15 minutos desde el pueblo. Es una playa nudista opcional que ofrece diferentes experiencias dependiendo de la marea: con marea baja, se destacan las rocas y la lejanía del agua más allá de un espigón, mientras que con marea alta, se convierte en un lugar ideal para bañarse, aunque el agua solo llegue a las rodillas si no se supera el espigón. Los visitantes resaltan los hermosos atardeceres con vistas a Lanzarote y la posibilidad de realizar buceo y snorkel, disfrutando de la rica vida marina como sargos y viejas. Aunque no es considerada la mejor playa de la isla en comparación con la Francesa y la de las Conchas, es valorada por su tranquilidad, su accesibilidad y las piscinas naturales que se forman con la marea alta, ideales para niños. No obstante, se menciona la falta de servicios como baños y la pobre señal de móvil. La playa, además, es elogiada por su entorno natural y la posibilidad de disfrutar de la naturaleza y la tranquilidad, aunque el acceso es de arena, lo que dificulta la llegada en bicicleta.